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    Cadáver de la galería Tonsa, la confesión del imputado y el traslado del cuerpo en un Cabify

    El caso del joven desaparecido Edgardo Jesús Gabriel Lucero Ramírez (29) en Mendoza ha tomado un giro impactante con la confesión del presunto autor del crimen, Vladimir Cristian Cayo Coronel, de 28 años.

    Cadáver de la galería Tonsa, este viernes, la División Homicidios logró detener al imputado y también aprehendió al conductor del Cabify utilizado para trasladar el cadáver.

    La investigación, que comenzó como una averiguación de paradero el miércoles 6 de este mes, se convirtió en un caso de homicidio en los últimos días. El hallazgo de pistas cruciales llevó a los detectives hasta la Galería Tonsa, donde el celular de Lucero Ramírez emitió su última señal. Las cámaras de seguridad del centro comercial captaron imágenes macabras que revelaron la entrada del joven a un comercio de celulares, ubicado en el local Saturno 69.

    En un giro perturbador, las imágenes también mostraron a individuos saliendo del establecimiento con un bulto envuelto en bolsas de consorcio, que, según fuentes cercanas al caso, tenía «aspecto del cuerpo humano». Los sospechosos transitaban por los pasillos de la galería, pasando junto a clientes y trabajadores. Posteriormente, con la colaboración del chofer, cargaron el cadáver en el baúl de un Fiat Cronos blanco, parte de la flota de la aplicación de viajes Cabify en la provincia.

    Este viernes, en el marco de la instrucción liderada por el fiscal de Homicidios Carlos Torres, se llevaron a cabo medidas que culminaron con la detención de Vladimir Cristian Cayo Coronel, propietario del local donde se cometió el crimen. El sospechoso, originario de Los Corralitos, Guaymallén, fue interceptado en el microcentro de Mendoza, confesando ante los policías y admitiendo haber asesinado a Lucero Ramírez. También reveló que enterró el cuerpo cerca de su domicilio en el este de Guaymallén.

    Los investigadores, siguiendo la información proporcionada por el imputado, realizaron un rastrillaje en la zona de calle 2 de Mayo, donde descubrieron tierra removida en un callejón comunero. Con la colaboración de bomberos, excavaron y encontraron un cadáver que coincidía con las características físicas del joven desaparecido.

    Aunque la confirmación oficial espera la necropsia y un cotejo de ADN, las fuentes consultadas indican que todo apunta a que se trata del cuerpo de Lucero Ramírez.

    Simultáneamente, en Las Heras, los investigadores detuvieron al conductor del vehículo utilizado para trasladar los restos de la víctima. El chofer, de 26 años y empleado de la aplicación de viajes, quedó bajo custodia en la Comisaría Cuarta. El fiscal Torres evaluará si corresponde imputarlo en relación con el traslado de los restos de Lucero Ramírez. La comunidad mendocina sigue conmocionada por este espeluznante cadáver de la Galería Tonsa.

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