Tras varios días de espera debido a cierres fronterizos, miles de ciudadanos chilenos se apresuran a regresar a su país a través del cruce a Chile que abrió hoy.
El pasado fin de semana, aproximadamente veinte mil ciudadanos chilenos llegaron a Mendoza con la intención de realizar compras y deleitarse con la exquisita gastronomía local.
Sin embargo, debido a las condiciones climáticas adversas, el paso fronterizo se vió obligado a cerrarse el sábado, lo que dejó a unas diez mil personas varadas sin poder cruzar.
El día de hoy, viernes, la frontera con Chile ha vuelto a abrirse, y se ha registrado un notable incremento en el flujo de pasajeros tanto en la Terminal de Micros como en Uspallata.
«Estamos ansiosos por volver a casa. Disfrutamos más de lo esperado aquí en Argentina, y afortunadamente, el tipo de cambio nos ha beneficiado. Sin embargo, aún tenemos asuntos pendientes en Chile», expresó una de las viajeras chilenas que se encontraba dispuesta a regresar a su país en autobús.
Durante las primeras horas de la jornada, el personal de Gendarmería informó un gran movimiento de personas en Uspallata, la mayoría de las cuales eran chilenas ansiosas por retornar a su tierra natal. Este escenario se repitió en la Terminal de Micros.
Se estima que las demoras en el paso fronterizo de Los Libertadores podrían superar las 4 o 5 horas, especialmente teniendo en cuenta que la mayoría de los viajeros regresan con una considerable cantidad de mercancía, lo que implica controles minuciosos y exhaustivos.