El último pedido de las víctimas en los casos de abusos sexuales vinculados al Caso Próvolo consiste en que se clasifique esta conducta como crímenes de lesa humanidad.
Sergio Salinas, querellante de las víctimas sordas del Próvolo, se presentó ante el Tribunal de La Haya, para exigir que estos delitos sean considerados “crímenes de lesa humanidad”.
Salinas, miembro de la agrupación Xumec, fue designado representante de América Latina de la ONG ECA Global, desde donde expusieron ante autoridades de la Corte Penal Internacional sobre el caso de abuso eclesiástico por el que ya fueron condenados dos curas en Mendoza.
En ese contexto, pidieron que se lo considere un crimen de lesa humanidad y volvieron a reclamar colaboración a la Iglesia.
“Al mundo le interesa que esto se frene. No puede seguir habiendo abusos contra niños y por eso reclamamos en Roma, en Ginebra y en el tribunal de La Haya, y, como representante de América Latina, recobramos casos de víctimas de diferentes lugares levantando la generalidad, y la sistematicidad”, explicó.
“Solo en Mendoza, y en parte, hubo justicia. En el Próvolo de La Plata no hay nada, en Chile nada, en Colombia nada y ahora recientemente en Canadá han aparecido mil niños muertos enterrados abusados bajo la impunidad de la Iglesia, más otros mil en Suiza”, resaltó Salinas.
De todas maneras, el 18 de este mes, el Tribunal Penal Colegiado 2 de Mendoza, donde se lleva a cabo el tercer juicio por abusos sexuales perpetrados contra menores con discapacidad auditiva en el Instituto Próvolo de la provincia, emitirá su fallo en relación a las ocho acusadas por abusos sexuales y la negligencia en la denuncia de dichos abusos, incluyendo a dos religiosas entre ellas.