Salas de Escape, el acusado por los presuntos abusos sucedidos hace una semana que ya había declarado ante la Justicia, le resolvieron el caso.
Máximo Guariento de 20 años, el sospechoso por los abusos sexuales en las salas de escape de Godoy Cruz que se entregó la semana pasada y fue imputado, este lunes recibió el beneficio de la prisión domiciliaria. La misma se hará efectiva cuando rinda una fianza.
Tal como lo había planteado el abogado defensor en el momento de ponerlo a disposición de las autoridades en el Polo Judicial, el joven dejará de estar tras las rejas más allá de la continuidad de la investigación en su contra: está imputado en cinco hechos de abuso sexual simple (tocamientos) agravados por la guarda, delito con penas de 3 a 10 años de prisión.