Mendoza se encuentra en estado de máxima tensión. El Servicio Meteorológico Nacional ha elevado el nivel de riesgo a alerta roja ante el pronóstico de un Viento Zonda de una intensidad poco común, con ráfagas que alcanzarán y posiblemente superarán los 90 km/h. Esta amenaza natural desató un Miedo extremo justificado en el Gran Mendoza.
El gap de curiosidad es el riesgo no visible. El Miedo extremo no solo se debe a la intensidad de los 90 km/h, que puede derribar muros débiles y árboles, sino a la baja humedad y el calor abrasador que trae el Viento Zonda. Esta combinación multiplica el riesgo de incendios forestales y urbanos, un peligro que se agrava en las zonas de interfaz.
La promesa de valor de esta nota es la guía de protección. Box Diario enumera las precauciones esenciales: no encender fuego bajo ninguna circunstancia, asegurar elementos sueltos en balcones y terrazas, y resguardarse en interiores. La alerta roja obliga a la suspensión de clases y actividades al aire libre, y el Miedo extremo se convierte en la principal motivación para la prevención.
La intensidad del Viento Zonda a 90 km/h representa una amenaza seria para la infraestructura eléctrica y las telecomunicaciones, con riesgo de cortes de energía prolongados. El Miedo extremo obliga a las autoridades a desplegar un operativo de emergencia para atender los posibles incidentes.
La alerta roja por Viento Zonda no es una exageración. El Miedo extremo es la reacción natural ante un fenómeno que puede ser destructivo a 90 km/h. Es un momento para actuar con responsabilidad, priorizando la seguridad y siguiendo las recomendaciones oficiales.




