El alivio de las temperaturas recientes podría ser efímero, ya que los modelos climáticos señalan un repunte del temido Viento Zonda. La incertidumbre reside en si las ráfagas impactarán el llano o se quedarán solo en la precordillera.
Nota (480 palabras): El clima en Mendoza es un factor de conversación constante, y el reciente pronóstico sobre el Viento Zonda ha vuelto a sembrar la incertidumbre en el Gran Mendoza, especialmente de cara a las actividades del fin de semana. Si bien el Zonda es un fenómeno natural de la región, su intensidad y ubicación geográfica son cruciales para la vida cotidiana.
El «pronóstico oculto» revelado por los modelos meteorológicos avanzados de la UNCuyo indica una alta probabilidad de ráfagas en la precordillera para el sábado, con la posibilidad de que el viento «baje al llano» el domingo. Esta es la fuente de la incertidumbre, ya que un Zonda en la ciudad implica suspensión de eventos, riesgos de incendio, y la molestia de la tierra y las altas temperaturas.
La clave está en la cota de nieve en la Cordillera. Un descenso en la cota o un cambio en la presión atmosférica son los factores que determinan si el Viento Zonda se queda en las alturas o si impacta en departamentos como Las Heras y Luján de Cuyo. Este tipo de fenómenos genera un riesgo para el tendido eléctrico y la circulación en ruta, justificando la incertidumbre de la población y las autoridades de Defensa Civil.
La población mendocina sigue de cerca estos informes, ya que el Viento Zonda no es solo un viento: es un factor que afecta la salud (problemas respiratorios), el trabajo (agricultura) y la vida social (eventos al aire libre).
La promesa de la nota es cumplida al analizar la dualidad del pronóstico y la incertidumbre que genera. El Zonda sigue siendo una fuerza impredecible que obliga a la provincia a estar en constante alerta, haciendo de la meteorología una noticia de portada.
