La limpieza social en Río: el Comando Vermelho contraataca en el operativo policial más grande de la historia.
La ciudad de Río de Janeiro vive horas de Terror puro. El megaoperativo lanzado por las fuerzas de seguridad contra el comando vermelho rio, una de las organizaciones criminales más grandes y violentas de Brasil, degeneró en una verdadera «guerra civil» en las favelas y áreas circundantes. Los reportes oficiales indican decenas de muertos, en su mayoría presuntos miembros del Comando Vermelho, y el número sigue escalando. La emoción del Terror es el reflejo de la total indefensión de los habitantes.
El objetivo del operativo era desmantelar las estructuras financieras y operativas del comando vermelho rio que, según la inteligencia, se habían fortalecido considerablemente. Sin embargo, la resistencia narco fue más feroz de lo esperado. Los enfrentamientos con fusiles de asalto se extendieron durante horas, transformando las zonas de conflicto en verdaderas zonas de batalla. El Terror se siente en el toque de queda autoimpuesto en la ciudad.
El comando vermelho rio no solo se limita al narcotráfico; sus tentáculos abarcan el tráfico de armas, el contrabando y el control territorial de amplias áreas urbanas. La exhibición de fuerza por parte del grupo criminal es un mensaje claro al nuevo gobierno: que el Estado no tiene el control absoluto. Los vecinos de las favelas, que quedaron en el medio del fuego cruzado, son las víctimas inocentes de esta espiral de Terror y violencia sin fin.
Los derechos humanos están en el centro del debate. Las organizaciones internacionales denuncian que la alta cifra de muertes sugiere posibles ejecuciones y un uso excesivo de la fuerza. Mientras tanto, el gobierno defiende la dureza del operativo como la única forma de recuperar los territorios perdidos.
La clave del conflicto es que el comando vermelho rio ha tejido una red de lealtades y miedo que trasciende la criminalidad simple. Es una estructura paramilitar que controla la vida de miles de cariocas. El Terror no es solo el del enfrentamiento, sino el de saber que, una vez que la policía se retire, la venganza del Comando Vermelho puede ser aún más cruel. Río está en vilo, esperando que el sol traiga un poco de calma a una noche de balas y Terror.
