El fútbol de Ascenso mendocino se encuentra de luto tras la trágica y prematura muerte del DT de Luján Sport Club, a la edad de 35 años. La noticia ha causado un profundo dolor en la comunidad deportiva, especialmente porque el deceso se produjo minutos después de que el joven técnico sufriera una descompensación en el campo de juego, tras un partido amistoso de pretemporada.
El dolor es inmenso porque el DT de Luján, Damián G., era considerado una promesa de la dirección técnica, con un futuro brillante en el Ascenso. Los reportes indican que la descompensación fue súbita, producto de un paro cardiorrespiratorio. A pesar de los esfuerzos del cuerpo médico presente, no se pudo reanimarlo. Este trágico suceso ha puesto en el foco la necesidad de chequeos médicos más rigurosos, incluso para los cuerpos técnicos.
El Ascenso es una categoría donde la pasión y el estrés son altísimos. El dolor y la tristeza de los jugadores y dirigentes de Luján son el reflejo de una categoría que a menudo se ve obligada a operar con recursos limitados, lo que incluye la atención médica inmediata en los estadios. La muerte del DT de Luján es un recordatorio de que el deporte de alta competencia, incluso en el Ascenso, exige precauciones máximas.
La liga mendocina ha decretado tres días de luto. El dolor por la pérdida de un hombre tan joven y apasionado por el Ascenso es compartido por todos los clubes rivales. La familia del DT de Luján ha recibido un aluvión de mensajes de apoyo. Este trágico evento obliga a la AFA y a las ligas regionales a revisar sus protocolos de salud y prevención. El dolor por Damián G. se convierte en una bandera para exigir mejores condiciones médicas en el Ascenso, asegurando que el juego se mantenga como una fuente de alegría y no de tragedia.




