El ingrediente que tienes en tu cocina y que usas para ensaladas se ha convertido en el secreto de belleza más compartido en TikTok. Te contamos la mezcla exacta que debes usar, pero cuidado, los odontólogos mendocinos tienen una advertencia crucial.
La búsqueda de la sonrisa perfecta ha llevado a los usuarios de redes sociales a encontrar un aliado inesperado en la alacena: el vinagre de manzana. Este producto, venerado por sus propiedades digestivas y antisépticas, se ha viralizado como el «blanqueador dental perfecto, rápido y sin ir al dentista», generando un gran asombro por su supuesto poder milagroso.
La premisa detrás de la tendencia es simple. El vinagre de manzana es rico en ácido acético, un compuesto que teóricamente ayuda a descomponer la placa y las manchas superficiales causadas por el café, el té o el vino. El método que se promueve en los videos virales es hacer una dilución: una parte de vinagre por tres partes de agua, y usarla como enjuague bucal por 30 segundos, repitiendo el proceso dos o tres veces por semana.
Sin embargo, la realidad científica es mucho más compleja y potencialmente peligrosa, y allí radica el curiosity gap que promete valor a nuestros lectores. Box Diario consultó al Dr. Germán Rosales, odontólogo especialista del Colegio de Odontólogos de Mendoza, quien emitió una advertencia crucial a la población.
“Si bien el vinagre de manzana tiene propiedades ácidas que pueden blanquear, su uso indiscriminado o mal diluido es sumamente agresivo con el esmalte dental”, explica Rosales. El esmalte es la capa protectora del diente, y el ácido acético, si se aplica con demasiada frecuencia, puede erosionarlo de forma permanente, llevando a una sensibilidad dental crónica y, paradójicamente, a un oscurecimiento mayor del diente a largo plazo al exponer la dentina subyacente.
El truco viral, por lo tanto, es una espada de doble filo. La clave para que el blanqueamiento sea seguro y efectivo radica en la supervisión profesional. Rosales recomienda a los mendocinos que, antes de probar este método casero, consulten a su odontólogo. Si bien el vinagre de manzana puede usarse de forma ocasional y bien diluida como enjuague, nunca debe sustituir a los tratamientos profesionales. El asombro por la rapidez del truco no puede primar sobre la salud bucal.
Para un blanqueamiento seguro, la ciencia indica que solo los geles con peróxido, aplicados con el control de un especialista, garantizan resultados duraderos sin dañar el esmalte. La promesa del vinagre de manzana es tentadora, pero el riesgo de una hipersensibilidad irreversible es el precio que podrías pagar por un ahorro de corto plazo.




